Tras la denuncia de un grupo de comerciantes de venta de comida que se quejaban por las constantes descargas de las aguas residuales que emanan de las cámaras frigoríficas, en el desembarcadero pesquero del distrito de La Cruz, que está ubicado cerca al muelle y el coliseo municipal “Henrry Pardo”, funcionarios de la Oficina del Medio Ambiente Intervinieron.
Como se ha informado, los comerciantes pedían la intervención de la municipalidad, ya que estas aguas residuales discurren y quedan estancadas en el frontis de sus puestos, lo que origina olores nauseabundos y, además, impiden al público consumidor visite estos stands de comida rápida.
Los vecinos indican que el problema lleva años y las autoridades poco hacen para solucionarlo. Entre las aguas residuales se pueden ver gusanos que atentan contra la salud de la población.
Los niños son los perjudicados, quienes inocentemente juegan entre las aguas estancadas que presentan hongos; muchos de ellos tienen granos en la piel y la proliferación de zancudos amenaza con una epidemia.
Es así, que el último viernes, funcionarios de la Oficina del Medio Ambiente de la comuna cruceña en compañía del personal del serenazgo, dialogaron con el presidente de la Asociación de Manipuleo de Productos Hidrobiológicos, quienes se comprometieron en realizar trabajos de mantenimiento con el fin que estas aguas no discurran y terminen en los stands de comida rápida.