Cansados de las constantes peleas ocasionadas en estos locales que en muchas ocasiones funcionan sin el debido permiso de la autoridad competente, habitantes del distrito de Corrales en la provincia de Tumbes alertaron ante este medio sobre la proliferación de bares y cantinas en esa localidad, lugar en el que de acuerdo a lo manifestado por los vecinos de diferentes sectores, nadie controla estos sitios en los cuales en ocasiones incluso hasta utilizan armas de fuego y ponen en riesgo la integridad de las personas.
Ese mencionar que no sería la primera vez que recibimos una queja relacionada con este tema en el distrito de Corrales, lugar en el que según refieren los habitantes de esa localidad, al alcalde distrital, Jorge Ordinola Infante al parecer “le quedó grande el título de burgomaestre”, puesto que durante más de 14 meses de gestión hasta ahora no soluciona ninguno de los problemas que aquejan a estas comunidades.
“Somos víctima de la incapacidad del alcalde, quien debería velar por gestionar el cierre de estos lugares de ‘mala muerte’, donde los parroquianos una vez se encuentran bajo los efectos del alcohol, ‘hacen de las suyas’, quiénes sin importar la presencia de menores de edad hacen escándalos, miccionan en la vía pública y nunca faltan las peleas en las que en ocasiones resultan heridos de gravedad”, denuncia una madre de familia residente de dicha localidad.