Reunión suspendida entre alcaldesa y trabajadores aumenta la incertidumbre; limpieza pública y otros servicios podrían paralizarse si no se resuelve pronto la deuda
En Corrales, los trabajadores municipales enfrentan una grave situación debido a la deuda de tres meses en pagos por beneficios laborales correspondientes a junio, julio y el mes de agosto que está por llegar. Estos pagos, derivados de los Pactos Colectivos y respaldados por la Ley de Relaciones Colectivas de Trabajo (Decreto Legislativo N.° 728 y su Reglamento, D.S. N.° 010-2003-TR), son de cumplimiento obligatorio para la autoridad municipal.
Se había programado una reunión confirmada entre la alcaldesa Yuvicza Zárate Martínez y representantes sindicalizados de los trabajadores municipales para abordar esta problemática. Sin embargo, a menos de dos horas para el encuentro, la reunión fue suspendida sin anunciar una nueva fecha, lo que aumenta la incertidumbre entre los afectados.
La falta de pago está impactando económicamente a los trabajadores y sus familias, que dependen de estos ingresos para cubrir necesidades básicas. Además, fuentes municipales advierten que la continuación de esta situación podría poner en riesgo servicios esenciales como la limpieza pública, generando acumulación de basura y un posible paro laboral que afectaría directamente a la ciudad.
Cabe destacar que en gestiones anteriores estos pagos se efectuaban con normalidad, pero bajo la administración actual permanecen pendientes. En este contexto, surge la cuestión sobre el rol de los regidores, quienes según la Ley Orgánica de Municipalidades (Ley N.° 27972, Artículos 9 y 10), tienen la obligación legal de fiscalizar la gestión municipal, exigir el cumplimiento de la ley y proteger los derechos laborales. La interrogante es: ¿dónde están los regidores ante esta crisis?
Los trabajadores esperan una pronta solución para evitar que los servicios esenciales se detengan y que la ciudad de Corrales enfrente mayores perjuicios.