1.- «Te falta poco para que te vayas Jimy Silva y no has parchado un solo hueco. Las pistas están destrozadas», le dicen los choferes de todas las líneas de autos y mototaxistas de Tumbes. «Nuestros vehículos se malogran, nosotros tenemos nuestros riñones destrozados por su incapacidad, dónde quedaron sus promesas de campaña, – lo único que saben decir – no hay plata y que están gestionado». El abogado Damián Sánchez le dijo: “Te he dejado 7 millones de soles de recaudación para el sector transporte”, ¿Dónde está la plata? Es la pregunta que se hacen los choferes.
2.- No se inaugura la planta de oxígeno, ya habría problemas por no contratar a ingenieros electromecánicos para que realicen el trabajo de mantenimiento, porque ya habría deficiencias manifestaron los consejeros. Señor Wilmer Dios usted es el gobernador de la región y tiene la responsabilidad de velar por la vida de los tumbesinos, ya se avecina una tercera ola y estamos muy atrasados con la vacunación -que nos espera- solo rogar a Dios, porque la verdad nuestras autoridades han demostrado mucha ineficiencia.
3.- El canciller Héctor Béjar renunció a su puesto, y todo esto se debe a las críticas que viene recibiendo por todas partes, y con más razón, pues este señor que ya no tiene edad para llevar un cargo dentro del ministerio. Se atrevió a decir que La Marina de Guerra inició el terrorismo en el Perú, y que han sido entrenados por la CIA. Esto dejó mal parada a la institución. Una vergüenza total, fue justo que haya renunciado, ya que el Congreso estaba por dar su censura contra el ahora ex canciller.
4.- El gobernador de Tumbes también estuvo en la protesta realizada por los comerciantes en Aguas Verdes, que piden la reapertura de la frontera, él se comprometió viajar a Lima para reunirse con el primer ministro y plantear la necesidad que tienen los tumbesinos, y se tomen medidas urgentes; también indicó que se debe de coordinar con el Ecuador para ponerse de acuerdo y se autorice la apertura. Al paso que van con la vacunación lo vemos muy difícil, lo que tiene que hacer el pueblo es presionar a las autoridades, para que vayan a Lima y no vengan hasta que no hayan resuelto nuestras necesidades, si no todo será como siempre, “un paseo”.