Los pobladores del caserío de Tacural, en el distrito de San Juan de la virgen, mostraron su malestar ante los constantes colapsos de aguas servidas que terminan convirtiendo la zona en un foco infeccioso que atenta contra la salud. Según señalaron, hasta el momento las autoridades no se hacen presentes.
También señalan que constantemente tienen que soportar los olores fétidos que producen estos desagües y que además producto de las aguas estancadas se convierte en proliferación de zancudos que afecta enormemente a la población, especialmente a los niños.
“Pasan y pasan los años y seguimos escuchando promesas. No nos dicen cuándo se acabará este tormento. Se espera que esta gestión municipal haga algo. El alcalde de Tumbes es quien tiene que ejecutar la obra, pero no se le ha visto por acá, indicó una vecina.
En ese contexto, los pobladores del caserío dicen sentirse cansados del mismo problema que ya lleva años y hasta la fecha nadie puede darle solución.
“Ya tenemos nuevo alcalde, ahora esperar que cumpla con lo que prometió en campaña, porque para eso el pueblo lo ha escogido, para que trabaje”, enfatizó.