GRANADA 0 – 2 MÁNCHESTER UNITED
De la heroicidad…al milagro. Ese segundo tanto del Manchester United a escasos minutos para el final convierte el sueño con el sueño del Granada en una gesta, consistente en ganar en Old Trafford por al menos dos tantos de diferencia. Casi un milagro. Un conjunto red devil serio e imponente, en preaviso por Solskajer de las virtudes de la revelación europea, como viene mostrando como rasgo característico en este tramo final de temporada, prevaleció su pegada sobre la ilusión de un bloque nazarí con más nervio que argumentos ofensivos.
Muchos de ellos se quedaron en el banquillo, con la suplencia de Machís. Así que el Granada basó su plan en el abrigo defensivo y la suerte del balón parado, con el magistral laboratorio de Diego Martínez. Pero bastó medio despiste y un pase milimétrico de Lindelof desde la retaguardia sobre la bota de Rashford, para, en tres toques, batir a Rui Silva y derribar el castillo de naipes andaluz. El plan, tras un gran inicio, se tambaleaba tras agarrar el United el timón sin contestación alguna.
Diez minutos finales, con remate de Yangel, el mejor, al palo incluido, alimentaron la fe. Pero la segunda mitad corrió la misma suerte, con la realidad del United, sin soltar el bastón de mando imponiéndose.
ARSENAL 1 – SLAVIA DE PRAGA 1
El gol de Holes en el 93′ cambia por completo la eliminatoria. Se las veía muy felices el Arsenal, pero vuelve a pecar de falta de contundencia y se complica el pase a semis con ese gol recibido. El conjunto ‘gunner’ dominó la primera mitad, pero con poca profundidad. Sólo Saka pudo adelantar al Arsenal. En la segunda mitad las fuerzas se nivelaron, pero Willian y Lcazette tuvieron dos palos. El Slavia también tuvo las suyas, aunque menos claras. Pépé marcó en el 86′ con una definición de libro y parecía que el partido estaba sentenciado. Sin embargo, un remate de cabeza de Holes en un saque de esquina silenció aún más el Emirates.
AJAX 1 – ROMA 2
La Roma obtiene de su visita a Ámsterdam un resultado que vale su peso en oro para la vuelta. El Ajax, que venía lanzado de su liga, que domina de forma incontestable, ha recibido una bofetada de realidad del conjunto romano, que la ha infligido tal vez un castigo demasiado excesivo.
Los de Ten Hag tuvieron las ideas más claras en el segundo acto pero, paradógicamente, fue cuando encajaron los dos tantos. El primero, un error grosero de Scherpen en un lanzamiento de falta de Pellegrini que acabó hallando la red. El segundo, un auténtico golazo de volea de Roger Ibáñez.
El Ajax, aunque no imposible, tiene difícil el pase a las semifinales. El penalti fallado por Tadic puede pagarlo caro el combinado amsterdammer.
DINAMO ZAGREB 0 – 1 VILLAREAL
Las estadísticas de Gerard esta temporada, con 24 goles y ocho asistencias, son imponentes. Su 2021, inmaculado: 15 tantos, 7 pases y titularidad asegurada en la Selección. Pero es su liderazgo, el miedo que infunde en el rival y la confianza que contagia en su equipo lo que de verdad le da grandeza. El Villarreal se plantó en Zagreb con el gen competitivo en estas eliminatorias que patentaron Emery y Bacca, tiranos de la Europa League, pero también con cierta necesidad histórica. Y fue Gerard el que, en el peor momento, con el Dinamo más descarado e invicto en su estadio, se inventó una jugada en un rincón del área que convirtió en un penalti que él mismo transformó. Fue justo antes del descanso, cuando más se disfruta y más escuece. Las estrellas aparecen cuando más se las necesitan. Y él nunca falla a la cita.
Tras el Bayern-PSG del Champions, que pareció otro deporte, cualquier comparación es odiosa, así que a estas alturas igual es mejor no intentar engatusar. El Submarino cambió su obsesión de siempre por la brillantez y en su estrategia tiró más de oficio. Foyth y Capoue dieron una pátina de profesionalidad que elevó un punto más la solidez. Parejo y Trigueros picotearon de maravilla entre líneas y, a falta de desborde y pegada, con Chukwueze más tímido que de costumbre, explotó las subidas por la izquierda de Pedraza. El lateral, un correcaminos infatigable, tuvo dos buenas ocasiones (6’ y 20’). El Dinamo, por su parte, intentó repetir algunas de las buenas costumbres que mostró ante el Tottenham. Circuló rápido y bien en el primer tiempo, conectó compulsivamente con Orsic y Majer, pero le faltó colmillo en los metros finales. Ni las dudas de Rulli a balón parado le ayudaron.
Con el 0-1, el Dinamo perdió la confianza y el descaro y se dedicó a perseguir a un Villarreal solidario y bien armado. Emery ordenó contención en las salidas y seriedad, y su plan pasó por ir metiendo frescura sólo en aquellos sectores donde el cansancio se acumulaba. Alcácer entró al descanso y dejó grandes detalles, mejores cuantos menos toques da. Pudo marcar el segundo en el 65’ con una asistencia magistral de Gerard. El equipo por fin no se desordenó como le sucede a veces con el actual carrusel de cambios, que aunque es optativo se toma en ocasiones como obligatorio, y fue teniendo cada vez más protagonismo con balón. Y eso, con la calidad y profundidad que tiene en el banquillo, le sirvió para tener opciones de sentenciar. Moi, que entró por Chukwueze, estuvo incisivo. La ventaja no pudo ampliarse pese a la insistencia de Trigueros. Pero el botín no es pequeño ni anecdótico. El Villarreal, además de tener un pie en semifinales, ha aprendido a competir. Y eso es una estupenda noticia en su sueño primaveral de pasar a la historia con títulos y no sólo con méritos.
Peru.As