Un total de seis ambulancias forman parte del cementerio de once vehículos abandonados que se encuentran en la playa de estacionamiento de Ciudadela Noé, en Tumbes, desde hace varios meses. Esta inacción de las autoridades sanitarias no permite aumentar la capacidad de respuesta ante la pandemia del nuevo coronavirus, la misma que va matando a más de 580 personas.
La Oficina de Control Interno (OCI) de la Dirección Regional de Salud (Diresa) emitió el Informe de Orientación de Oficio 014-2020 donde especifica que seis ambulancias se encuentran deterioradas por el paso del tiempo. Tres de ellas necesitan mantenimiento y las restantes no sirven, es decir, están inoperativas y tienen más de 28 años, aproximadamente.
Los otros vehículos son automóviles y una coaster que alguna vez fueron utilizados para el traslado del personal médico y administrativo. Esta vez, cada uno busca la forma de acudir a su centro de labores pese a que estamos en pandemia.
Estos vehículos se encuentran expuestos ante el desmantelamiento y/0 retiro de piezas, así como el riesgo de contaminación y propagación de enfermedades. Es contexto refleja, claramente, la desidia de las autoridades en mejorar el servicio médico.