Mujer que le vendió el medicamento no quiso hablar ante la prensa
Cinco menores de edad han quedado huérfanos después de que su padre tomara una pastilla de insecticida pensando que era para el dolor de garganta, según los testigos, el hombre acudió a una bodega para comprar el medicamento.
Sin embargo, al intentar comprar más pastillas para que consumieran sus hijos, se percata que era veneno, pero su cuerpo había comenzado a sufrir los efectos, llegando demasiado tarde al hospital regional de Tumbes, donde sólo informaron de su deceso.
La familia, ha quedado consternada tras la inesperada muerte de Duber Maza Huamán, de tan solo 39 años de edad, quien días antes había vencido una enfermedad, por lo que retornó a su puesto de trabajo en el mercado de Zarumilla.
Los hechos se suscitaron en horas de la mañana en el mercado de la provincia fronteriza, cuando Maza Huamán compra pastillas para el dolor de garganta, sin presagiar que le habían vendido insecticidas. La esposa del occiso ha exigido justicia y el cierre del local debido a que no existe una supervisión de las cosas que venden.
“Su tienda es de abarrotes que hace vendiendo pastillas, cuando no está autorizada. El Ministerio Público y la Policía llegaron pero no la llevaron detenida, ella sigue vendiendo en el mercado”, sostuvo Esmeralda Tocto Gonza.
Hechicera intentó entrevistar a la presunta responsable de la venta del medicamento pero no quiso responder, sin embargo, ante el Ministerio Público sostuvo que de un frasco grande había sacado las pastillas para vender al agraviado. “En frente del señor saqué la pastilla del frasco porque el olor es horrible y se lo entregué”, señaló la sindicada.
La agraviada también recalcó que su esposo tuvo que esperar media hora en la posta de salud para ser derivado al hospital regional de Tumbes, debido a que la ambulancia no contaba con gasolina, tiempo valioso donde se pudo lograr un lavado gástrico.
“Mi esposo se pudo salvar, si no fuera por el doctor y la falta de gasolina, lo hubieran evacuado a tiempo. Mi esposo corrió a la posta cuando supo que había tomado veneno, pero no lo atendieron”, denunció Esmeralda Tocto.
Duber Maza deja cinco hijos en la orfandad, él era el sustento de su hogar.