A raíz de la primera debido a la pandemia COVID- 19, se destinó un terreno a la altura del “Centro Experimental Tumpis”, en plena panamericana norte, para que los fallecidos por el letal virus sean enterrados sin costo alguno por miedo a la propagación del coronavirus.
Esta área fue elegida debido a su lejanía con la población; sin embargo, en la actualidad los parientes de los fallecidos al pretender trasladar los restos mortales a otros cementerios se llevaron la sorpresa que tenían que pagar una suma de más de dos mil soles, considerando esta tarifa exuberante para las personas que carecen de los recursos económicos necesarios.
El gerente municipal de la provincia de Zarumilla accedió a rendir algunas declaraciones para Diario Hechicera; afirmando que no consta que determinado territorio se le brinde sesión de uso por parte de esta casa municipal y sus funcionarios al no ejercer jurisdicción en la territorialidad del cementerio COVID, no tienen mayor competencia para poder intervenir.
Indicó que por el estado de emergencia se tomaron acciones rápidas e improvisadas debido al temor de la población, en un trabajo colaborativo con la DISA (dirección regional de salud).
Debido a que los servicios son brindados de carácter privado para dicha exhumación de los cadáveres, se generan gastos de traslado, administrativos, para la verificación de la disponibilidad del nicho, más la mano de obra entre palaneros y máquina, además del cajón nuevo para su traslado.
Gibson Rivera / Jorge Rueda