Los vecinos del barrio Bellavista, en el cercado de Tumbes, se encuentran cansados de las aguas servidas que han formado una verdadera laguna a pocos metros de sus viviendas. Esto en plena pandemia por el nuevo coronavirus.
Los vecinos reclamaron porque la laguna de aguas servidas está provocando la proliferación de moscos y sobre todo, malos olores que ni siquiera los dejan comer, en las intersecciones de las calles 7 de Enero y Francisco Ibáñez. Hay un promedio de 50 familias afectadas, pero cuatro de ellas tienen el aniego en la puerta de sus viviendas.
Los moradores sostienen que en este lugar las aguas servidas de las partes altas van a terminar en dicho lugar.
Los moradores invocaron al alcalde de Tumbes al igual que Aguas de Tumbes a solucionar el problema, pues a la autoridad edil Jimmy Silva Mena solo lo ven por las redes sociales y no junto a ellos.
Cabe mencionar, que igual panorama se repite frente a la vivienda de la pareja de esposos Milagros Rodríguez y José Hidalgo, pues ya no saben a dónde quejarse.