No llega a la reunión pactara por el alcalde delegado para llegar a un acuerdo
Como ya es costumbre el alcalde de Tumbes, Hildebrando Antón Navarro, dejó plantados a la población de Pampa Grande, quienes en los últimos días han solicitado se respete el terreno del cementerio, después de que la comuna haya reafirmado que parte del predio pase de manera definitiva al Ejército Peruano.
Para ello, el alcalde delegado del centro poblado, Carlos Eraso, solicitó al burgomaestre provincial, que anule dicha resolución y se envíe a sesión de concejo para que pueda retornar a la comuna de Pampa Grande y seguir administrando el campo santo.
Sin embargo, la población tuvo que esperar más de dos horas para que algunos de los regidores de la municipalidad provincial se hicieran presente, pese a ello, Hildebrando Antón no se asomó a la entidad tras las múltiples llamadas y mensajes que se le hicieron a su número privado.
Los vecinos han indicado que no permitirán que se les quite los cerca de 20 metros cuadrados del campo santo que pretenden cederle al Ejército, donde ya existen tumbas y que este último fin de semana los soldados procedieron a tumbar, haciendo respetar la resolución firmada por Hildebrando Antón.
La población ha anunciado protestas, si el alcalde no procede a respetar el terreno que por años ha sido administrado por la municipalidad del centro poblado de Pampa Grande, y donde existen gran cantidad de difuntos que descansan en dicho lugar.
Mientras, Antón Navarro, continúa de oídos sordos y sin ver la realidad, la población organiza una marcha en señal de protesta frente a las decisiones tomadas junto a sus funcionarios; además, el alcalde delegado prepara junto a sus abogados una denuncia contra el alcalde.
En tanto, los regidores que asistieron solo escucharon al alcalde delegado, Carlos Eraso.