Profesionales no trabajan y “dobletean” en otra obra, inspector sin experiencia, fisuras y materiales de baja calidad, entre otros problemas
Un nuevo escándalo sacude la Universidad Nacional de Tumbes (UNT). Un informe del Órgano de Control Institucional (OCI) ha revelado que la ejecución del millonario proyecto “Mejoramiento del Servicio de Gestión Institucional en Educación Superior Universitaria”, que costará a los contribuyentes S/ 3,380,167.35, está plagada de irregularidades, omisiones y negligencia que ponen en riesgo la calidad de la obra y podrían derivar en un gigantesco despilfarro de recursos públicos.
El informe N° 005-2025-OCI/3550-SCC, correspondiente al Hito de Control N° 4, detalla cuatro situaciones adversas de gravedad extrema, que evidencian el descontrol y la falta de supervisión en este proyecto que, lejos de mejorar la educación, se perfila como un monumento a la incompetencia y la presunta corrupción.
Pagan por profesionales que NO trabajan en la obra. Uno de los hallazgos más alarmantes del informe es que el personal clave, que según el contrato debería estar presente de manera permanente en la obra, brilla por su ausencia. Durante las visitas de inspección realizadas en enero y febrero, los auditores de la Contraloría encontraron que el residente de obra y el especialista en estructuras NO estaban en el lugar en repetidas ocasiones.
Más grave aún es la situación de la especialista en seguridad en obras, Lizbeth Catherine Arrese Sandoval, quien figura con presencia del 100% en la obra de la UNT, pero al mismo tiempo aparece en otro proyecto en la Municipalidad Provincial de Tumbes. Es decir, trabajaba en dos obras a la vez, lo que es físicamente imposible.
La ingeniera habría estado cobrando dos sueldos simultáneamente, un claro indicio de posible colusión y estafa al Estado.
UNT designó a un inspector de obra sin experiencia suficiente. Como si lo anterior no fuera suficiente, la UNT designó a un inspector de obra que no cumple con los requisitos mínimos exigidos por la ley. Se trata del Ing. Hilmer Bladimir León Gonzales, a quien se le asignó la supervisión del proyecto sin contar con la experiencia mínima de 30 meses en obras de infraestructura educativa.
La obra se está ejecutando sin una supervisión técnica adecuada. El Reglamento de la Ley de Contrataciones del Estado es claro: el inspector debe cumplir al menos con la misma experiencia requerida para el residente de obra. Sin embargo, la UNT ignoró este requisito fundamental y puso en manos inexpertas una obra de más de tres millones de soles.
Según la Contraloría, la universidad ni siquiera se tomó la molestia de comprobar si el inspector cumplía con los requisitos antes de designarlo. Sin una supervisión adecuada, la calidad de la construcción queda en la incertidumbre y aumenta el riesgo de fallas estructurales.
Losa aligerada con fisuras y materiales de baja calidad. Durante una inspección realizada el 4 de febrero de 2025, la Contraloría descubrió deficiencias estructurales preocupantes en la construcción de la losa aligerada, la cual presentaba fisuras en el concreto apenas un día después de su vaciado.
La losa podría estar mal ejecutada, lo que afectaría su resistencia y durabilidad, representando un riesgo de colapso a futuro. El informe detalla que el proceso de fraguado y curado del concreto fue deficiente, es decir, no se tomaron las medidas necesarias para garantizar que el material adquiriera la resistencia adecuada.
En un intento por ocultar el problema, los responsables aplicaron una mezcla de cemento tipo lechada sobre las fisuras y usaron un curador membranil, como si con eso pudieran disimular el daño.
La inspección también reveló que se utilizó caña de Guayaquil en lugar de madera para el encofrado de la losa, lo que NO estaba contemplado en el expediente técnico. Se utilizó un material más barato, lo que podría significar un intento de recortar costos de forma indebida y perjudicar la calidad de la obra.
Riesgo de sobrecostos y deficiencias en la fiscalización. El informe advierte que la obra podría estar encaminada al desastre financiero si no se toman medidas inmediatas. La falta de supervisión, la ausencia de personal clave, las fallas en la losa aligerada y la mala ejecución del proyecto ponen en peligro la inversión millonaria.