Las restricciones impuestas por el gobierno central para prevenir la COVID-19 no se respetan en nuestra región, peor aún cuando se trata de las ordenanzas municipales. En la ciudad de Tumbes, está claro que muchos bares, cantinas y licorerías siguen funcionando sin ningún tipo de control.
Nuestro medio de comunicación entrevistó al encargado de la Subgerencia De Comercialización y este manifestó que a partir de esta semana se va a poner “mano dura”, debido a que ya han notificado a todos estos lugares y lamentablemente se les ha dado mucho plazo para que respeten las normas pero ellos no entienden.
“Hemos sostenido reuniones de coordinación y los operativos van a continuar en Puerto Pizarro, Andrés Araujo y Tumbes”, indicó.
John Yarleque Mogollón precisó que se procederá a las denuncias correspondientes y al tapiado de los locales que persisten en funcionar, pese a que ya han sido clausurados definitivamente. “Esta vez vamos a tapiar los locales o bares y en la noche los operativos serán contundentes, con el decomiso respectivo”, acotó.
El personal con el que cuenta el área de la Subgerencia De Comercialización es mínimo, pero según el funcionario, debido a la colaboración de la Policía Municipal, agentes de Serenazgo y apoyo de la policía, se han podido realizar algunos operativos en las diferentes zonas de Tumbes.
Con respecto a la licorerías que siguen vendiendo bebidas alcohólicas sin control, pese a que existe una ordenanza municipal que lo prohíbe, Yarleque especificó que ya se han notificado a todos los establecimientos y que ahora lo que corresponde es el cierre definitivo y la multa correspondiente.
“Todos han sido notificados pero no entienden, no se quiere colaborar y ahora no van a decir que no se advirtió. Las normas tienen que respetarse”, enfatizó.
Se espera que lo indicado por el funcionario no sea simplemente una promesa más y que ahora se ponga realmente “la mano dura”, debido a que la situación de contagio por la COVID-19 está incontrolable en nuestra región, siendo el deber de las autoridades y funcionarios hacer valer el principio autoridad.