Al promediar el mediodía personal de la sub gerencia de comercialización de la Municipalidad Provincial de Tumbes realizó un operativo de control al comercio ambulatorio, el que terminó en una batalla campal en plena avenida Piura.
La bronca comenzó en la esquina de calle Navarrete y avenida Piura, donde el personal de la comuna intervino a unas vendedoras de sábanas, quienes se enfrentaron a ellos para evitar el decomiso de su mercadería.
Minutos después aparecieron unos vendedores informales de nacionalidad venezolana, quienes comenzaron a insultar a los fiscalizadores. La situación terminó agravándose y los ambulantes cogieron palos para atacar al personal municipal, mientras que ellos se defendieron con sus baras de reglamento.
Personal de la policía tuvo que intervenir y lanzó disparos al aire para disuadir la pelea. Producto del enfrentamiento terminó un venezolano golpeado y semidesnudo, el que finalmente fue trasladado a la comisaría del barrio San José.
Johnny Ancajima, funcionario de la municipalidad, condenó esta brutal agresión contra el personal que cumple con liberar las vías públicas ocupadas por estos comerciantes ambulantes.
Uno de los agentes fue rociado con agua y lejía, cayéndole en el rostro y terminando con ronchas en todo el cuerpo, además otro agente resultó con el pómulo hinchado y varios hematomas producto de la brutal agresión.
PREFERENCIAS. Se sabe que están prohibidas las reuniones y el ocupar la vía pública pero parece que la comuna de Tumbes y la policía tiene preferencias con un grupo de personas que usan la calle para realizar ritos religiosos.
Con un sonido estrepitoso vulneraron la tranquilidad de la zona y ningún personal municipal hizo algo al respecto.