El alcalde de Tumbes Jimy Silva Mena se pronunció sobre los resultados de las últimas elecciones y fue inevitable que saliera a relucir su aparente “piconería” porque su hombre de confianza y amigo personal, Javier Moquillaza, recibió el repudio de la población en las urnas y perdió la oportunidad de conseguir una curul.
La autoridad lamentó que los tumbesinos eligieron a representantes que no son de esta región. “Tenemos que reflexionar muchísimo, acaso queremos que nos gobiernen personas que no conocen la realidad de Tumbes. A mi no me pesa la voz para decir que quien desconoce eso, muy poco puede hacer por nuestra región”, refirió.
Ciertamente hay serios cuestionamientos con respecto a los congresistas electos pero ello no santifica a su “hijo político” Javier Moquillaza, quién se ganó a pulso el repudio de la población por sus desaciertos como funcionarios de la municipalidad. Pese a ello, Jimy Silva lo defiende y saca la cara por él.
“Yo considero que la labor desempeñada por Javier Moquillaza en la Municipalidad, ha sido bastante exitosa. La razón por la cual no ganó debe ser analizada por su partido”, señaló.
Fiel a su estilo, Jimy Silva no hizo un mea culpa por indirectamente perjudicar la campaña política de Moquillaza con su cuestionada gestión municipal; por el contrario, de forma sutil daba entender que es culpa de la prensa.
“También hay orientadores de opinión, yo pregunto si los medios de comunicación han hecho su labor para que los verdaderos tumbesinos sean los que representen a Tumbes”, enfatizó.
Es importante recordarle al alcalde que la labor de un medio de comunicación responsable es analizar a todos los candidatos sin excepción y advertir acerca de quienes son cuestionados por su mal ejercicio como funcionarios o por haber cometido delitos de corrupción, independientemente de si son tumbesinos o no.