El domingo 20 de setiembre, se levantó la inmovilización social obligatoria en nuestra región pero con algunas restricciones como la prohibición, a nivel nacional, del uso de vehículos particulares para circular. Así lo dispone el Decreto Supremo N° 151-2020-PCM, aprobado por el Gobierno, que establece las medidas que debe seguir la ciudadanía en la nueva convivencia social y prorroga el Estado de Emergencia Nacional por las graves circunstancias que afectan la vida de la nación a consecuencia de la Covid-19.
La norma dispone la inmovilización social obligatoria de todas las personas en sus domicilios desde hoy lunes 21 de setiembre del 2020, desde las 23:00 hasta las 04:00 horas del día siguiente.
Precisa que las reuniones sociales, incluyendo las que se realizan en los domicilios y visitas familiares, se encuentran prohibidas, por razones de salud y a efecto de evitar el incremento de los contagios a consecuencia de la Covid-19.
Durante la inmovilización social obligatoria, se exceptúa el personal estrictamente necesario que participa en la prestación de los servicios de abastecimiento de alimentos, salud, medicinas, servicios financieros, servicio de restaurante para entrega a domicilio (delivery), la continuidad de los servicios de agua, saneamiento, energía eléctrica, gas, combustibles, telecomunicaciones y actividades conexas.
Asimismo, limpieza y recojo de residuos sólidos, servicios funerarios, transporte de carga y mercancías y actividades conexas, actividades relacionadas con la reanudación de actividades económicas, transporte de caudales, esto último según lo estipulado por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).

Durante la inmovilización social obligatoria se permite que las farmacias, droguerías y boticas puedan brindar atención de acuerdo a la norma de la materia.
Pese a esto en la región de Tumbes se vio gran cantidad de vehículos particulares que circulaban a lo largo del domingo que se levantó la inmovilización. La escasa presencia de los inspectores de tránsito de la municipalidad y de la policía hacían más notoria el desorden en el centro de Abastos y alrededores.