Personal de Serenazgo de la Municipalidad Provincial de Tumbes vigilia las 24 horas del día, el burdel “La Gallina” en pleno cercado de Tumbes con el fin que no reabra sus puertas.
Como se ha informado dicho lenocinio fue tapiado el pasado 13 de mayo por parte de la Subgerencia de Comercialización de la comuna tumbesina y la Policía.
DE TODO. A pesar de la pandemia por la COVID-19, dicho prostíbulo clandestino ubicado en la calle Mariscal Castilla venía funcionado como si nada pasara. En la vivienda también se encontró colchones viejos, preservativos, ropas interiores, entre otros objetos.
La Policía logró intervenir a Barba Guerrero Lucia de 46 años, Flor María Cubas Balcázar de 37 años y Joselyn Ube Zambrano de 27 años, esta última de nacionalidad ecuatoriana, así mismo se intervino a algunos parroquianos, quienes manifestaron que aquí se les cobraba 30 soles, por los servicios sexuales.
Según la resolución de la Gerencia de Desarrollo Económico de la Sub Gerencia de Comercialización, que lleva la firma la Arq. Selene Mendoza Guerrero la propietaria de la casa identificada como Griselda Esperanza Cruz Infante fue multada con 8,600 soles.
Cabe mencionar, que dicho lenocinio ha sido clausurado en varias oportunidades por la MPT.