Existe una inquietante probabilidad de que el Perú se vea azotado simultáneamente por el Niño Global y el Niño Costero. Las autoridades y los expertos proyectan que estos fenómenos climáticos podrían golpear nuestra tierra en los próximos meses, concretamente durante el primer trimestre de 2024. El clamor desesperado de medidas preventivas resuena de manera unánime.
Las consecuencias a las que se enfrentaría la población peruana serían catastróficas: lluvias torrenciales, inundaciones masivas, huaicos y deslizamientos de tierra. El panorama que se avecina es similar al desolador escenario de 2017, cuando se registraron víctimas mortales, decenas de miles de damnificados y enormes daños materiales a nivel nacional.
Las inundaciones provocadas por el último Fenómeno El Niño, entre enero y marzo de 2017, afectaron a 1,9 millones de personas en Perú. Miles de familias perdieron sus casas y fuentes de ingreso. Se estima que más de 500 mil viviendas fueron afectadas. Las pérdidas económicas por el desarrollo de este evento natural ascendieron a más de 3 mil millones de dólares.
Según el último informe de la Comisión Multisectorial Encargada del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen), existe una “alta probabilidad” de que el Niño Costero y el Niño Global coincidan en el verano del próximo año. La combinación de estos eventos, advierte el organismo, generará un calentamiento anormal de las aguas del océano Pacífico.
El calentamiento de las aguas del Pacífico traería consecuencias muy negativas para el Perú. El aumento de la temperatura de los océanos provoca tormentas más severas y potentes e interrumpe el ciclo del agua, lo que significa más inundaciones en las zonas costeras, sequías e incendios forestales, así como un aumento inexorable del nivel del mar.
Felipe Parado, miembro del Consejo Directivo del Centro de Estudios y Prevención de Desastres (Predes), se refirió a la ocurrencia del Niño Costero y Niño Global en nuestro país y afirmó que “se van a juntar”.
“Tenemos la presencia del Niño Global que son las aguas que vienen del otro lado, del medio del Atlántico, y el Niño Costero que son las aguas que vienen aquí, pegadas a nuestra costa, del Ecuador. Entonces, vamos a tener que se van a juntar estos dos fenómenos”, señaló a Exitosa Noticias.
Precisó que el porcentaje de la aparición del Niño Global es del 82 % y en cuanto al Niño Costero es del 77 %, lo que quiere decir que “los pronósticos son de mediano débil a moderado”.