El pleno de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) resolvió por unanimidad destituir al juez supremo Martín Alejandro Hurtado Reyes al haberse acreditado su responsabilidad en dos de los cuatro cargos que se le imputaron y que constituyen faltas muy graves.
“Sus dos inconductas revelan una tendencia a irrespetar las reglas de conducta intachable que debe observar todo magistrado, especialmente un juez supremo”, manifestó María Zavala, miembro instructora de este Procedimiento Disciplinario 001-2020-JNJ.
Martín Hurtado incurrió en faltas muy graves previstas en el artículo 48, incisos 4 y 13 de la Ley de la Carrera Judicial, al haber solicitado al ex juez supremo César Hinostroza que interviniera en el trámite de un expediente que iba a ser elevado a la Corte Suprema de Justicia; y al haber faltado a su deber de mantener conducta intachable en todo momento (como consecuencia del cargo anterior).
“Está acreditado que el investigado incurrió en una conducta de intromisión e injerencia en una causa judicial (…). Se ha fijado que lo anterior ocurrió, logrando establecerse e identificarse incluso con toda precisión dicho expediente, que correspondía a un Recurso de Queja Excepcional 474-2017-Lima Norte”, afirmó Zavala.
Sin embargo, el exmagistrado fue absuelto de haber coordinado irregularmente, a modo de favor, con César Hinostroza la contratación de personal CAS; así como de haber accedido a atender al señor Julián Feijó, quien era parte en un proceso judicial, a solicitud del exjuez mencionado.
“No se advierte evidencia suficiente que el investigado, en el ejercicio de su función de presidente de la Comisión de Infraestructura del Poder Judicial, haya efectuado gestiones (…) para conseguir personal para dicha comisión”, precisó la miembro instructora.
En este sentido, el pleno de la JNJ –con abstención de la presidenta Inés Tello– votó unánimemente por imponer la sanción de destitución a Hurtado Reyes y le canceló el título de juez supremo.