El primer estudio sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) generativa en un espacio laboral ha revelado que esta mejoró la productividad en un 14%.
Bloomberg informa del estudio realizado dentro de una compañía de software en la lista Fortune 500 de la cual no fue revelado su nombre.
Investigadores de la Universidad de Stanford y el Instituto de Tecnología de Massachusetts revisaron el impacto de este tipo de herramientas durante el transcurso de un año.
Inteligencia artificial en el trabajo: ¿Cuál fue su impacto?
El rendimiento de más de 5 mil agentes de atención al cliente, basados principalmente en Filipinas, fue seguido por los investigadores.
Los agentes fueron divididos en dos grupos: uno con acceso a herramientas de inteligencia artificial entrenadas en base a datos sobre buenas conversaciones con clientes y otro alejado de estas herramientas.
La inteligencia artificial logró mejorar el rendimiento de los trabajadores, teniendo mayor efecto en aquellos trabajadores menos entrenados, logrando que realicen su trabajo un 35% más rápido.
En general, se observó una mejora de productividad en un 14%.
¿Y qué pasará con quienes entrenan a la IA?
El estudio sugiere que este “subidón” en el rendimiento de los trabajadores menos hábiles se logra gracias al conocimiento absorbido por la inteligencia artificial de los trabajadores con mejor desempeño y luego diseminado al resto de la compañía.
Los investigadores hallaron que la IA daba un pequeño o ningún beneficio a los trabajadores más hábiles, quienes mas bien alimentaban las bases de datos con sus hallazgos e informes.
Queda la pregunta de si los “trabajadores estrella” deberían recibir una compensación extra por entrenar a una IA que finalmente terminará beneficiando a toda la compañía.