Contratista ausente, supervisor desaparecido y seguridad en riesgo
Una obra de infraestructura académica por S/2.6 millones destinada a mejorar la formación de pregrado en la Escuela Profesional de Agroindustrias de la Universidad Nacional de Tumbes presentaría graves irregularidades en su ejecución, según un informe de control concurrente de la Contraloría General de la República. El documento, emitido el 21 de octubre del 2025, evidencia la ausencia del supervisor de obra, deficiente manejo de residuos, falta de limpieza en la zona de construcción y riesgo para la integridad física de trabajadores y estudiantes.
La situación es preocupante no solo por las deficiencias detectadas, sino porque persisten irregularidades previamente advertidas que la UNTUMBES señaló haber corregido, pero que continúan presentes en la obra ubicada en la Av. Universitaria, AA.HH. Pampa Grande, en Tumbes.
Ausencia reiterada del supervisor. El Informe de Hito de Control N° 022-2025 revela una situación que cuestiona directamente la calidad de supervisión técnica de la obra. Durante la inspección realizada el 7 de octubre del 2025 a las 09:30 horas, el supervisor de la obra, ingeniero José Heberth Cayle Neciosup, llegó tardíamente (09:40 horas) al sitio de construcción.
Sin embargo, en la segunda visita de control, realizada el 16 de octubre del 2025 a las 9:40 horas, el supervisor no se presentó.
Lo más grave es que el residente de obra manifestó no tener conocimiento ni justificación alguna sobre la inasistencia del supervisor. Un supervisor que no sabe dónde debe estar, que no tiene comunicación efectiva con el residente de obra y que falta a sus obligaciones contractuales es, simplemente, un supervisor que no existe en los hechos.
Contrato por S/2.6 millones. El contrato fue suscrito el 23 de abril del 2025 con el Consorcio Agroindustria, integrado por IDAJ Bienes y Servicios EIRL y Comercializadora MARASAWI SRL, por un monto total de S/2,634,356.88 soles. La obra debía culminarse el 12 de noviembre de 2025 y en la fecha del informe se encontraba con un avance aproximado del 80%.
Sin embargo, los términos de referencia para la contratación del supervisor establecen claramente sus obligaciones: «Supervisar que la ejecución de los trabajos se efectúe de conformidad con el expediente técnico. Realizar un seguimiento de forma permanente a los trabajos que ejecute el contratista, verificando el cumplimiento de los avances en cada una de las partidas.»
La palabra «permanente» no es casual. Significa que el supervisor debe estar presente de manera regular y consistente, no de forma esporádica o selectiva. Si el supervisor no puede cumplir esta obligación básica, entonces está incumpliendo su contrato y debería enfrentar penalidades.
De hecho, los Términos de Referencia del supervisor contemplan una penalidad por ausencia injustificada: 0.5 UIT (Unidad Impositiva Tributaria) por cada día de ausencia del personal. Una UIT en 2025 equivale a S/5,150, lo que significa que cada día ausente del supervisor debería generar una penalidad de S/2,575.
Material excedente acumulado. La Contraloría verificó en ambas visitas de control (7 y 16 de octubre) que el contratista continúa realizando labores de construcción sin haber realizado la eliminación total de la tierra excavada en la obra.
El material excedente acumulado dificulta el libre tránsito del personal dentro de la obra y el correcto acopio de los agregados que se utilizan en el proceso constructivo.
Al permitir que el material excedente permanezca acumulado en la obra, se está violando explícitamente esta normativa de seguridad que tiene por objeto proteger la vida e integridad de los obreros.
Además del material excedente, la Contraloría documentó fotográficamente la existencia de «otros materiales de construcción dispersos por la obra», incluyendo encofrados de madera, guayaquiles (tablones de madera), plásticos y restos de material orgánico que habían sido utilizados en trabajos constructivos anteriores.
Según las imágenes adjuntas al informe, estos materiales se encuentran dispersos por toda el área de la obra, incluso obstruyendo el ingreso de la misma.
Situaciones adversas previas no corregidas. Lo que hace más preocupante la situación es que estas no son las primeras irregularidades detectadas. Según el informe, en el Informe de Hito de Control N° 019-2025 se había identificado una situación adversa anterior: «Contratista ejecuta trabajos con cerco perimétrico en mal estado y genera el riesgo de afectar la integridad y seguridad del personal obrero, estudiantes y personal administrativo».
La UNTUMBES, mediante el Oficio N° 101-2025 de fecha 3 de septiembre del 2025, señaló que se habían adoptado acciones correctivas. Sin embargo, cuando la Comisión de Control verificó en campo, constató que «las situaciones adversas continúan».
Plazo vencimiento cerca. El informe señala que el plazo para la culminación de la obra es el 12 de noviembre del 2025, y considerando que al 17 de octubre estaba solo al 80% de avance con un adicional de obra pendiente que afectaría la ruta crítica del proyecto, existe una alta probabilidad de que la obra no se termine a tiempo o que se complete de manera apresurada, sacrificando calidad por cumplir plazos.

