Una adolescente de 15 años pretendió acabar con la vida de cuatro integrantes de su familia tras disolver veneno para roedores en los alimentos del almuerzo que preparó en su casa ubicada en la calle Raúl Jiménez, Mz. T, lote No. 3, en la urbanización Salamanca del distrito de José Leonardo Ortiz.
Las víctimas de este frustrado homicidio fueron identificadas como Segundo Álvarez Tello (53) (padre), Lila Oblitas Vásquez (45) (madre), y los hermanos Ángela Pamela (18) y Sergio Jonathan (23) Álvarez Oblitas (23), este último cadete del primer año de la Escuela de Oficiales de la Policía Nacional del Perú.
En su casa
La Policía informó que el atentado ocurrió la tarde del último miércoles. Asimismo, se indicó que los agentes conversaron con los esposos Segundo Álvarez y Lila Oblitas, quienes manifestaron que su menor hija se ofreció a preparar el almuerzo para toda la familia en su domicilio, el cual les fue servido por ella misma a las 2:30 de la tarde; sin presagiar que lo peor estaba por suceder.
Precisaron que después de haber ingerido los alimentos comenzaron a sentirse mal de salud, por lo que Ángela Pamela fue llevada al hospital Las Mercedes de Chiclayo y su hermano Sergio Jonathan al Hospital Regional de la Policía. Ambos quedaron internados luego que les diagnosticaran envenenamiento por sustancias desconocidas.
Los progenitores también Indicaron que al saber que habían sido envenenados, bebieron limonada con aceite, lo que les permitió que no vayan al hospital y puedan auxiliar a sus dos hijos.
Confesó a su tía
Al realizar la constatación en el inmueble, los efectivos de la comisaría de José Leonardo Ortiz conversaron con Irma Gil Tello (41), tía de la menor, quien precisó que la joven le narró que había mezclado los alimentos con veneno para roedores -“Racumín”- con el fin de atentar contra la vida de su entorno familiar porque viene afrontando problemas que está callando desde hace tiempo.
Luego, el atentado fue comunicado al personal de Homicidios de la División de Investigación Criminal (Divincri) para que se realice las pericias en el lugar del hecho y química forense a fin de continuar con las diligencias de ley.
Además, se comunicó a la representante del Ministerio Público, Melisa Núñez Alcántara, quien ordenó que la menor infractora sea puesta a disposición de la Divincri, con todos los actuados, para que el área de Homicidios asuma la investigación por ser de su competencia.
La mañana de ayer, los investigadores tomaron su declaración a la adolescentes en las instalaciones de la Divincri y, según se supo, ella confesó que realizó dicha acción debido a que sus familiares estaban en su contra, pues no la dejan utilizar las redes sociales y tampoco permiten que salga de su domicilio.
Posteriormente, los efectivos policiales informaron que la Fiscalía de la Familia determinaría la situación de la adolescente en las próximas horas.
