Tiene el fino arte del dibujo en sus manos, puede retratar con su pincel cualquier persona o paisaje, pero también lo puede hacer con sus pies ya que es un jugador muy técnico y habilidoso que te puede dibujar en la cancha, tanto así, que lo llaman el Ronaldinho tumbesino.
Desde muy niño estuvo en las diferentes categorías de la selección de Tumbes, llegando a estar presente en la copa Cantolao, hasta en dos oportunidades, se inició en el club de sus amores Mariscal Castilla, estando tres temporadas en la segunda división, a los 16 años ya jugaba para la selección de mayores de Tumbes, llegando a campeonar en la Copa Binacional en Ecuador, jugando al lado del «gordo» Masías, «costeño» Chira, «loco» Masías, Jim Quevedo, Ovalle, Zavala, Oliva, Ramón Vilches, Miguel Rosello, Camello Espinoza, Koki Cabrera, entre otros.
Jugó también en Independiente de Bellavista donde salió campeón jugando en la Copa Perú, luego fue a la Unión Pacífico, Buenos Aires, San Martín de Pampa Grande, Ejac Tumbes, luego pasó al UDCH de Aguas Verdes, donde salió campeón provincial, posteriormente regresó a Tumbes para jugar en Unión Pacífico y Carlos Concha. También hay que resaltar que reforzó para jugar la Copa Perú a los siguientes equipos, Sporting Pizarro, Unión Cerro Blanco, UDCH, Miraflores de Zarumilla, y Alfred Nobel.
