El cuarto bloque, dedicado a la Educación, Ciencia e Innovación, estuvo también cargado de propuestas. Por un lado, Fujimori ofreció priorizar la vacunación de todos los maestros para reaundar las clases presenciales y respetar los fallos del TC referidos a sus beneficios. Ofreció también 6 millones de computadoras con acceso a internet para que los estudiantes puedan seguir sus clases virtuales, y subsidiar el acceso a internet. Ofreció también modernizar los colegios que necesitan mejorar sus servicios básicos y construir 3 mil más a nivel nacional.

Por su parte, Castillo refutó el calificativo de «machista», y le pidió que pida perdón a las mujeres esterilizadas. «Yo no voy a implementar una palanca para electrocutar a mi madre», dijo, para a continuación insistir en que la educación no puede ser un servicio, sino que debe ser un derecho. Finalizó su intervención prometiendo que en su gobierno los jóvenes podrán ingresar a las universidades libremente, sin dar examen. 

Consultados sobre la meritocracia en la carrera magisterial, señaló que existirá, pero las reformas debían hacerse de abajo hacia arriba y no culpar al maestro, a quien se le debería capacitar. Una verdad enorme. Por su parte, Fujimori -luego de recordarle que siempre evade esa pregunta-, ofreció capacitaciones constantes a los maestros y mejorar la calidad de la enseñanza; también fortalecer la SUNEDU. Castillo culminó el bloque prometiendo «un presupuesto real para que los jóvenes salgan del país y regresen a impulsar el desarrollo en todas las regiones». 

El quinto bloque, dedicado a la lucha contra la corrupción e integridad pública, resultó también interesante por lo planteado. Fujimori inició refiriéndose a los más de S/ 23 mil millones que año a año se pierde por corrupción en el país y por las alusiones realizadas por Castillo momentos antes sobre la corrupción en el gobierno de su padre, y las investigaciones que tiene en curso, señaló que podía permitirse fallar en esa lucha. Ofreció fortalecer la Contraloría y aumentarle su presupuesto. También ofreció devolverle la capacidad sancionadora, una propuesta que a la fecha es prácticamente una ley, que espera que el Ejecutivo la publique. 

Castillo dio el golpe más fuerte. «No les suena a ustedes que hablar de corrupción es sinónimo del Fujimorismo» preguntó, para luego ofrecer también fortalecer a la Contraloría para que sancione a los corruptos. Prometió también crear el Consejo Nacional Anticorrupción formado por varias instituciones, incluida la iglesia. También fortalecer las fiscalías anticorrupción ampliando sus facultades, y desde el Congreso, con su bancada, plantear mejores leyes para sancionar eficazmente a corruptores y corruptos. «Promoveré que la sociedad civil se organice para fiscalizar a todos los funcionarios, y devolveremos a las fuerzas del orden la moral y el honor», finalizó. 

Consultados sobre los mecanismos para promover la integridad en la gestión pública, Fujimori le echó en cara la presencia de Cerrón y le recordó que si el doctor no formó parte de su plancha presidencial fue por la sentencia por corrupción que tiene y que lo inhabilitó para dicho cargo. En su intervención Castillo respondería diciendo que no habrá en su gestión persona vinculada con extremistas, y que acabaría con la planilla dorada. Y aquí vino otra promesa: «renunciaré al sueldo presidencialista», y quienes lo acompañarán como parte de su equipo asumen la responsabilidad de bajarse el sueldo a la mitad, enfatizó.  

En su intervención, nuevamente, Fujimori se refirió a Cerrón señalando que fue él quien impuso al vocero, pero a continuación ofreció 3 millones de conexiones de agua y alcantarillado y un programa para dar agua gratis mediante el uso de 2,500 camiones cisternas llamado «Agua para ti». Ofreció también un programa de protección a los denunciantes y en relación al tráfico de terrenos ofreció un nuevo programa llamado «Familote»  con el que se entregarían 200 mil lotes «concatenados con el programa Techo propio», impulsando COFOPRI para la entrega de 2 millones de títulos de propiedad. 

En una nueva intervención, Castillo dio un segundo golpe. «Estamos al frente del Perú dos líderes: uno del magisterio… y otra jefa de una red criminal elegida por Odebrecht, la propia Confiep, su prensa… el Grupo Romero…», que mereció por parte de la candidata como respuesta reiterada la referencia a la sentencia de Cerrón. Y finalizó su intervención anunciando la firma del compromiso con todos los peruanos que contaría con la presencia de Vargas Llosa.

La comunicación ha sido, o debió ser, fundamental. Para comunicar efectivamente necesitas dos cosas: un buen mensaje (contenido) y una manera efectiva de comunicarlo (forma), y en eso la ventaja la tuvo la candidata Fujimori. Los candidatos tuvieron una valiosa oportunidad. Si lo que pasó ayer en el debate es suficiente para determinar el voto de los indecisos, yo creo que no. Ganar un debate no asegura voltear el marcador. El domingo se sabrá.

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