Trabajadores municipales impiden la labor de reciclaje, destruyen chozas y emiten amenazas a recolectores
Un grupo de recicladores de la asociación «Cristofer Cooper Cerró Iglesias», en la provincia de Zarumilla, ha denunciado a los trabajadores del área de residuos sólidos de la Municipalidad Provincial de Zarumilla por presuntas amenazas y restricciones para continuar con su labor en el botadero municipal. Los recicladores, en su mayoría madres de familia, aseguran que esta actividad es fundamental para el sustento diario de sus hogares.
Según los testimonios, desde hace 20 años los recicladores han trabajado en el botadero municipal recuperando chatarra para su venta. Sin embargo, el pasado 27 de agosto de 2024, los trabajadores municipales comenzaron a realizar hoyos profundos donde entierran y depositan basura, lo que impide a los recicladores acceder a los residuos que necesitan para su labor. Esta situación afecta directamente su fuente de ingresos y pone en riesgo su estabilidad económica.
Además, los recicladores denunciaron que los trabajadores municipales han destruido las chozas que utilizaban para protegerse del sol y descansar. Durante los últimos tres meses, han estado recibiendo amenazas por parte del Consejo Municipal de Zarumilla, quienes les han advertido que, con el tiempo, no podrán acceder al botadero para recoger chatarra y que serán enviados al centro de la ciudad, decisión que, según los denunciantes, responde a órdenes del alcalde de Zarumilla, Christhian Aguayo Infante.
Los recicladores también informaron que se les obliga a esconderse cuando los representantes del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) llegan al botadero para realizar supervisiones. «Nos obligan a escondernos y no tenemos otra opción que hacerlo», señaló uno de los recicladores afectados.
Ante esta situación, los recicladores han hecho un llamado al alcalde de la provincia de Zarumilla, Christhian Aguayo Infante, para que intervenga y resuelva el problema de manera inmediata. Solicitan que se les permita continuar con su trabajo de reciclaje, dado que esta actividad es una fuente vital de ingresos para sus familias.
“Necesitamos que el alcalde, Christhian Aguayo, no nos limite el acceso al botadero municipal porque cuando él necesita nuestra colaboración como asociación, siempre estamos dispuestos a ayudar. Además, requerimos que tome medidas para mantener el orden en el lugar, ya que actualmente nos están amenazando y obstaculizando nuestro trabajo”, expresó uno de los padres de familia afectados.