Familiares de Julio César Miró Balladares, de 39 años, quien fue asesinado por sicarios en el interior de una obra en el distrito de Matapalo vienen pidiendo justicia y que su muerte no quede impune.
Según las primeras indagaciones policiales refieren que una organización criminal habría estado exigiendo a la empresa contratista el pago de cupos y ante la negativa adoptaron represalias. Y no por un ajuste de cuentas.
La familia de Miro Balladares
Indican que Julio César al igual que los dos heridos de bala son personas de bien y nunca han tenido problemas con la justicia.
Sostienen que el ataque ocurrió a las 2:45 de la tarde, aproximadamente del jueves, en el caserío Nuevo Progreso donde habían más de 20 obreros realizando trabajos de mejoramiento del servicio educativo N°133 Susana Higuchi Higuchi.
En ese momento pasó a baja velocidad una motocicleta con dos personas quienes sacaron sus armas de fuego para disparar a diestra y siniestra contra los trabajadores. Testigos indicaron que varios obreros se lanzaron al suelo y lograron esquivar los proyectiles; sin embargo, tres trabajadores fueron alcanzados por las balas.
Y que por cosas del destino uno de los proyectiles impactó a Julio César Miró Balladares, muriendo en el acto y dejando gravemente herido a Jhon Alexander y Cristhian Alberto Sandoval Eche.
