Durante la mañana del miércoles, nos dirigimos a las poblaciones de Plateros y la Peña, en el distrito de San Jacinto, dónde no percatamos de que la mayoría de instituciones educativas de estas localidades se encuentran completamente abandonadas, dónde los directores y responsables de las mismas ni siquiera llegan hasta estos colegios, tal es el caso de la escuela primaria de Plateros, dónde solo pudimos conversar vía telefónica con el guardián de la misma, quién nos dijo qué actualmente debido a que los maestros realizan las actividades de forma virtual, el es el único que de manera esporádica llega hasta este colegio para entregar los alimentos de Qali Warma.
En ese mismo colegio, logramos visualizar como las luces de está institución se encontraban encendidas a las 12 del mediodía, lo que da entender qué las mismas permanecen así las 24 horas, mientras que por otro lado, debemos agregar que el cerco perimetral de esta escuela es de alambre de púas, lo que no se ajusta a la realidad de una institución educativa dónde niños van para poder aprender en un ambiente apto para la enseñanza.
En este mismo sector, visitamos algunos otros colegios mismos que permanecen abandonados, con su infraestructura deteriorada, y el cerco perimetral prácticamente destruido en la mayoría de los casos, dónde además, se puede observar qué estas escuelas hace un buen tiempo qué no reciben ningún tipo de mantenimiento, lo que resulta verdaderamente preocupante ya que al no poder conversar con el personal directivo o encargados de estas instituciones, no sabemos en que se ha invertido los recursos provenientes del Ministerio de Educación.
En este caso en particular, debemos acotar qué llegamos hasta la residencia de la directora encargada de una de estas instituciones educativas, dónde al principio nos mencionaron que se encontraba en su vivienda, más sin embargo, la persona que salió a recibirnos luego de ingresar a la misma al regresar nos dio otra versión, diciéndonos que no se encontraba en el lugar, por lo que llegamos a la conclusión de qué la encargada de este colegio no quiso atender a la prensa.
Luego de esto, nos dirigimos hasta la localidad de la Peña, dónde llegamos hasta la institución educativa Santa Rosa de Lima, dónde nos encontramos con él penoso escenario en el cual el director de este colegio, quien aunque se encontraba en el lugar, se negó rotundamente a dar cualquier tipo de declaración a la prensa.
En ese sentido, debemos agregar que actos o como este dejan más dudas de las que teníamos al principio sobre la transparencia de algunos miembros encargados de la dirección de algunas instituciones educativas, quiénes al parecer sienten algún temor de transparentar su gestión, o por alguna razón evitan qué la población pueda conocer Las verdaderas condiciones en las que se encuentran estos colegios.
Acto seguido, luego de fallar en nuestro intento de conversar con el director de la institución educativa Santa Rosa de Lima, dónde se puede observar qué las condiciones del mobiliario y los baños de este colegio se encuentran en una situación deplorable, tratamos de sacar alguna información de los profesores de este plantel educativo, quiénes como si tuvieran algo que ocultar, tomaron la decisión de huir del lugar evitando a toda costa confrontar con las cámaras.
En ese contexto, hemos podido percatarnos de que el abandono las instituciones, educativas en algunos casos, no viene únicamente de los gobernantes, sino que además, al parecer existe poco interés por parte de algunos directores de estos colegios, quiénes se niegan a transparentar su gestión durante el tiempo de la pandemia.
