Sin temor a contagiarse de la COVID-19, varias personas se daban cita en dos bares clandestinos que operaban bajo inocentes fachadas de distintos negocios en el distrito de La Cruz. Los establecimientos fueron intervenidos en un operativo conjunto con fiscalizadores municipales, Ministerio Público, Serenazgo y efectivos de la Policía Nacional.
El primer local, que funcionaba como restaurante, Servicio Delivery, Productos del Mar Dolphin “Promardol”, con expendio de bebidas alcohólicas sin autorización, ubicado en la calle Centenario fue clausurado temporalmente por 7 días. Asimismo se impuso al propietario del local Vicente Gonzales Zapata una papeleta de infracción por “desarrollar actividades sociales recreativas y de concurrencia masiva”; seguidamente se impuso sanciones a las personas de Wilder Zárate del Rosario y Correa Zevallos Percy, quienes se encontraban en el interior consumiendo licor.
El segundo negocio, ubicado en el Sector Trujillo 4 a inmediaciones del cementerio municipal parte alta, un grupo de personas libaban licor sin respetar el distanciamiento social ni utilización de protocolos para evitar la propagación del COVID-19., quienes al notar la presencia policial se dieron a la fuga por los cerros.
Dentro del inmueble, se halló envases de bebidas alcohólicas, las cuales fueron incautadas. El local fue cerrado definitivamente y la dueña Julia Marleny Eras Sarango fue multada. Todas las personas intervenidas identificadas como Jordán Palacios Roa, Franklin Saavedra Romero y Wantil Peña Flores fueron sancionados con la papeleta respectiva. A pesar de encontrarse féminas no fueron identificadas y menos multadas.
En el operativo participó el Fiscal Adjunto Provincial de Prevención del Delito Dr. Javier Coveñas Vílchez, el Comisario del distrito Cap. Yollbi Saúl Macavilca Pasión, funcionario de comercialización de la municipalidad, Javier Zavala León y personal de Sub Gerencia de Seguridad Ciudadana de la comuna cruceña, con sus respectivas unidades móviles.
