Pésima calidad de trabajos generaron un deterioro prematuro pese haber sido inaugurado hace poco más de un año
En un informe emitido por la Contraloría General de la República, se han revelado una serie de preocupantes irregularidades en el estado situacional de la obra de «Mejoramiento del Servicio de Educación Básica Regular de la Institución Educativa N° 019 Isabel Salinas Cuenca de Espinoza del Distrito de Corrales». Este proyecto, ejecutado bajo la gestión del exgobernador José Alemán Infante, ha sido objeto de atención debido a múltiples fallas técnicas y constructivas que comprometen su calidad y operatividad.
La obra, adjudicada al Consorcio Nuestra Señora del Pilar II, conformado por Norperuana de Ingenieros SAC, Constructora Victorias Obras y Servicios SAC, y Empresa Galilea del Mar Constructora EIRL, por un monto de S/5 182 282,08, enfrentó desde su inicio una serie de desafíos que llevaron a significativos retrasos en su ejecución. A pesar de que se esperaba su conclusión para el 21 de junio de 2021, la obra presentaba un atraso del 54,24%, lo que derivó en la aplicación de una penalidad por mora que alcanzó el monto máximo del 10% del valor contractual vigente. Esta situación condujo a la intervención económica del Gobierno Regional de Tumbes, que tomó cartas en el asunto para acelerar su culminación. Finalmente, el proyecto fue recepcionado el 6 de diciembre de 2022, dando inicio a su etapa de liquidación.
Sin embargo, la revisión exhaustiva llevada a cabo por la Contraloría reveló una serie de deficiencias técnicas y constructivas que ponen en entredicho la calidad y la durabilidad de la obra. Entre las irregularidades más preocupantes se encuentran problemas en la instalación de los parantes de concreto del cerco perimétrico, que debieron ser encofrados con tubos de PVC de Ø3″, pero que aún se encontraban cubiertos con estos tubos, sin tarrajear ni pintar. Además, se observó una falta de uniformidad en la distancia entre los parantes y la presencia de parantes curvados, lo que indica una ejecución deficiente de los trabajos.
La deteriorada condición de los anclajes en parantes metálicos, fisuras y desniveles en la plataforma deportiva, humedad y moho en columnas y vigas, así como desprendimientos en la canaleta metálica, son solo algunas de las deficiencias físicas identificadas en la obra. Estos problemas no solo comprometen la seguridad estructural del edificio, sino que también afectan su funcionalidad y estabilidad a largo plazo.
Además, se detectaron problemas en la instalación de unidades de cerámica en las aulas de segundo, cuarto y sexto grado de primaria, así como fisuras en el parapeto del segundo nivel del pabellón. La falta de adherencia entre el revestimiento cerámico y el muro en el baño de varones del segundo piso, junto con la ausencia de tapas en las llaves de control de agua en los baños de varones y mujeres del primer piso, son otros problemas que evidencian la falta de atención a los detalles y el descuido en la ejecución de la obra.
La situación se agrava con la detección de una fuga de agua no localizada, reportada por el director de la Institución Educativa durante la inspección física de la obra. Esta fuga no solo representa un desperdicio de recursos, sino que también afecta directamente el servicio en la institución educativa, comprometiendo su funcionamiento y la comodidad de estudiantes y personal.
Estas deficiencias no solo representan un incumplimiento del objetivo establecido para la obra, sino que también plantean serios riesgos para la comunidad educativa. La falta de calidad en la ejecución del proyecto no solo socava la confianza en la gestión pública, sino que también pone en peligro la seguridad y el bienestar de quienes hacen uso de estas instalaciones.
Lamentablemente esta es solo una parte de la herencia dejada por la pésima gestión del exgobernador regional José Alemán Infante, cuyo gerente de infraestructura fue Lenin Ávila Silva, quien sigue hasta hoy en dicho cargo pese a su cuestionada labor y denuncias sobre presunta corrupción.
