Los familiares y amigos del profesor Walter Daniel Faria Guerrero, no tienen palabras para describir la indignación que sienten, luego de la brutal intervención policial en la que este profesional de la educación se habría visto involucrado, en la población de Corrales.

Como se recuerda, este hecho habría tenido lugar, en el distrito de Corrales, donde según información policial, este ciudadano se encontraría ingiriendo bebidas alcohólicas en un lugar denominado como “La Juana”, en la calle San Martín de la referida localidad, donde algunos testigos aseguran que, el procedimiento por parte de los uniformados no sería el más adecuado, manifestaron.

Acto seguido, familiares del profesor Walter Daniel Faria Guerrero, acudieron al centro hospitalario de ESSALUD, ubicado en la avenida Panamericana, lugar al que habrían trasladado al afectado, donde manifestaron que, personal de la Policía Nacional del Perú, les habrían puesto barreras para poder conocer el estado de salud del agraviado.

La situación se volvió aún más tensa, en el momento en que los familiares de Faria Guerrero, se dieron por enterados de que, este humilde trabajador habría perdido la vista de su ojo derecho, el cual tiempo atrás ya había recibido una intervención quirúrgica para poder salvarle su visión, sin embargo, luego de la brutal escena en la que, sin duda, recibió terribles golpes, donde a consecuencia de ello, sería diagnosticado con trauma ocular con pérdida de contenido intraocular, por lo que, sería necesario mantenerlo en observación, con el propósito de realizar diferentes exámenes médicos. 

Es de mencionar que, según acta policial, estas lesiones habrían sido producto de golpes recibidos debido a que el profesor Walter Daniel Faria Guerrero, habría intentado darse a la fuga, donde al parecer, al encontrarse bajo los efectos del alcohol perdería el equilibrio, cayendo de manera abrupta y golpeándose con algunos objetos contundentes que se encontraban en el lugar, donde se plasma textualmente, ( mesas , sillas de fierro) , todo ello luego de que se negara a ser detenido, al tiempo que “lanzaba insultos hacia los efectivos policiales”, versión esta que ha sido negada por los familiares del agraviado, quien producto de la gravedad de sus heridas, tuvo que ser trasladado a la ciudad de Piura, donde debería recibir atención médica especializada.

En este sentido, los familiares de Faria Guerrero, aseguraron reconocer al presunto agresor del educador, quien, según ellos, luego de haberle propinado la brutal golpiza a su hermano, se habría dirigido al centro de salud, “vestido de civil”, donde les habría amenazado con detenerlos y llevarlos a la comisaría, si continuaban tomando fotos y haciendo llamados a la prensa, donde incluso aseguraron que no les permitían trasladar al agraviado, alegando que este se encontraba en calidad de detenido, por lo que tuvieron que recurrir al fiscal, para que les permitieran aplicar los exámenes médicos correspondientes.

En este sentido, los denunciantes aseguran reconocer a este presunto mal elemento policial, de acuerdo a una fotografía, la cual se habría propalado en redes sociales, identifican a este sujeto con el nombre de; Espinosa Flores Romario Stuardo, del cual mencionaron, no sería la primera vez que los vecinos se quejan por algún mal procedimiento por parte del uniformado, quien según los familiares de Faria Guerrero, este agente de seguridad ciudadana, ya tendría denuncias por presunto abuso de autoridad.  

En horas de la mañana del martes, nos informaron que, finalmente Faria Guerrero, había sido trasladado a la ciudad de Piura, donde se le practicará la respectiva limpieza de su ojo, agregando que, se mantenían en total incertidumbre sobre su estado de salud, y el verdadero alcance de la gravedad del caso.

En este orden de ideas, nos dirigimos hasta la sede del Frente Policial Tumbes, donde intentamos obtener la versión oficial por parte del comandante general de la policía; más, sin embargo, el oficial de alto rango no pude atender nuestra solicitud, por tanto, al cierre de esta nota, aún no teníamos un pronunciamiento por parte de los uniformados, respecto a una posible investigación y sanciones con respecto al caso.

Mientras, algunos de los testigos del hecho se negaron a dar declaraciones a la prensa, por temor a represalias, es por ello que se exhorta a los organismos correspondientes a realizar las investigaciones correspondientes, las cuales permitan dar con los responsables de esta lamentable situación.

Exit mobile version