El Jurado Nacional de Elecciones (JNE) debe resolver las recientes apelaciones de Fuerza Popular para proclamar el resultado final de las elecciones presidenciales. Se estima que esta semana se pueda superar este último escollo del fujimorismo.

Fuerza Popular ha interpuesto 10 recursos contra las proclamaciones descentralizadas de cinco Jurados Electorales Especiales (JEE), que corresponden a los resultados electorales de las provincias de Cajamarca y Chota, en el departamento de Cajamarca; Huamanga, en Ayacucho; Huancavelica, en la región del mismo nombre; y San Román, en Puno.

Los JEE son la primera instancia de la justicia electoral. La última y definitiva es el JNE.

La mayoría de los recursos interpuestos ya han sido derivados al JNE para que este se pronuncie. Hasta el momento en que cerramos esta nota, faltaba que se envíen algunos pocos.

En sus recursos, Fuerza Popular pide que se anulen las proclamaciones de resultados de estas cinco provincias porque, según argumenta, no habrían cumplido la ley. Cuestiona la decisión del JNE de rechazar apelaciones del fujimorismo sin audiencia pública, determinación a la que se plegaron los JEE por venir de la instancia máxima.

Con estas apelaciones rechazadas por el JNE, Fuerza Popular pretendía anular votos de mesas de sufragio donde Pedro Castillo había conseguido gran ventaja sobre Keiko Fujimori.

El JNE no hizo audiencia pública para decidir sobre estas apelaciones porque fueron presentadas fuera del plazo o sin pago de la tasa reglamentaria. Ante esto, aplicó el Código Procesal Civil para resolver casos sin necesidad de audiencia y dar celeridad luego de tanta dilación del proceso. Los magistrados del JNE sesionaron, revisaron los argumentos de Fuerza Popular y votaron cada uno por su lado.

Superada esta controversia, los JEE ratificaron sus resultados electorales y los proclamaron.

Según la ley, contra las proclamaciones descentralizadas solo pueden plantearse apelaciones por errores numéricos. Sin embargo, el fujimorismo ha pedido nulidad usando un argumento ya superado por la máxima instancia electoral.

Aunque algunos especialistas consideraban que los JEE podían declarar improcedentes estos recursos porque no aducían errores numéricos, esta decisión habría abierto la posibilidad de que los ‘naranjas’ tengan tres días para poder presentar quejas contra los JEE, lo que dilataría más el proceso.

En cambio, en la mayoría de estos últimos recursos interpuestos, los JEE los están interpretando como apelaciones contra sus proclamaciones y los están derivando al JNE para que este decida de modo definitivo.

Si pasan todas estas apelaciones al JNE, este las buscará resolver juntas. Al no haber cuestionamiento a aspectos numéricos sino argumentos ya rechazados por el mismo JNE, este fuero las tendría que rechazar. Con esta última palabra, se comunica a la ONPE (Oficina Nacional de Procesos Electorales) para ratificar su conteo: al no haber prosperado ningún recurso fujimorista para anular votos, estas cifras ya quedarían reconfirmadas.

“Contra el acta de proclamación descentralizada solo cabe controversia por tema numérico y lo que se ha planteado no lo es. Lo que debería ocurrir es que el JNE resuelva y se acabó. ¿Cuál es el riesgo? Que uno de los magistrados se demore”, dice el abogado José Naupari, experto en derecho electoral.

La semana pasada, el magistrado Víctor Rodríguez Monteza, investigado en el caso Los Cuellos Blancos, retrasó el proceso al pedir sustentar su voto singular por apelaciones fuera del plazo y sin tasa pagada.

“Una vez que los JEE concedan la apelación, hay 24 horas para elevarlas al pleno del JNE. Secretaría General las recibe, califica en horas y ya se pueden programar. El JNE puede resolver en pleno sin audiencia”, asevera la abogada Karin Guevara, experta en derecho electoral.

Después de que resuelva el JNE, vienen los preparativos para la proclamación del resultado nacional y la ceremonia de entrega de credencial al ganador, a todas luces Castillo. Como siempre, ambas se deben dar el mismo día. Al ser el JNE la instancia electoral máxima, no cabe algún recurso posible contra su proclamación nacional.

Sin embargo, la especial situación del actual proceso hace que este paso tenga especial cuidado. Se teme que grupos de violentos seguidores de Fujimori pueden intentar más despropósitos para evitar la proclamación de Castillo. Ante esto, el lugar y la fecha se toman con precaución, aunque se busca que sea esta misma semana.

La República

Exit mobile version